Cuentan que el nombre de Calatañazor viene del árabe Qal`at an-Nusur que significa «castillo de los buitres».
Un castillo que, al igual que la localidad se quedó anclado en el tiempo. Pasear hoy por sus calles es como volver a la Edad Media entre casas con entramados de madera sabina.
Y, hablando de sabina. Justo a las afueras de Calatañazor se encuentra uno de los bosque de sabinas mejor conservado del mundo.
Quédate y descubre si esta va a ser tu próxima escapada.
No es ningún secreto que Calatañazor es uno de los pueblos más bonitos de Soria por eso, forma parte de la red de Los Pueblos Más Bonitos de España.
Lo curioso de Calatañazor es que ha logrado conservar todo el sabor a lo antiguo. Es como un parque temático de la Edad Media donde te pararás en cada esquina a buscar la mejor fotografía.
Cómo será la cosa, que si vas en otoño-invierno (ya sabes que siempre te recomendamos viajar fuera de temporada) desde la lejanía, este pueblo, ya transmite el frío de los páramos sorianos y es fácil imaginarse lo complicado que debía ser la vida de sus ciudadanos siglos atrás.
Pero, volviendo al presente, coge papel y lápiz o el móvil, con lo que te apañes mejor, y apunta estos 5 lugares que ver en Calatañazor.
1. Muralla:
De la existencia de la muralla te vas a dar cuenta según vayas llegando al pueblo.
Es del siglo XII, está perfectamente adaptada a la colina donde se asienta Calatañazor y ha sido restaurada hace muy poco, así que puedes disfrutar de ella en todo su esplendor.
Justo en la parte baja de la muralla encontrarás el aparcamiento donde dejar tu coche.
2. Calle Real:
Al atravesar la muralla te encontrarás con la Calle Real. Aquí empezará tu viaje al pasado, y es que, a lo largo de esta calle que llega hasta el castillo, irás acompañado de casas de arquitectura medieval con muros hechos de piedra, madera y adobe.
Fíjate bien en las chimeneas, que son súper curiosas. Tienen forma de cono, se las conoce como «Chimeneas Pinariegas» y son muy típicas de la zona en la que te encuentras, la de Pinares, entre Burgos y Soria.
Tampoco pierdas de vista los blasones, balcones y soportales, fliparás.
Por cierto… ¿Te suena eso de que en Calatañazor Almanzor perdió su tambor? Sí, sí, fue en este Calatañazor… ¡¡A ver en cual te creías que era!!. Y, como era de esperar, en la Calle Real encontrarás su estatua, pero… ¿Te sabes su historia?
Se cuenta que Almanzor, tras haber asolado Galicia y profanado Santiago de Compostela, se encaminó hacia Castilla. Pero las tropas del rey Bermudo II de León y del conde García Fernández de Castilla le salieron al paso en Calatañazor.
El enfrentamiento fue duro, murieron miles de musulmanes. Al llegar la noche, Almanzor, al ver que estaba todo perdido, se fugó.
Al día siguiente, las tropas cristianas fueron hacia el campamento enemigo pero lo encontraron vacío aunque se llevaron un buen botín.
La batalla de Calatañazor sería, por tanto, la primera derrota y, a la vez, la última batalla de Almanzor.
Desde el mismo día de la derrota, un hombre, se lamentaba en las calles de Córdoba en castellano y en árabe exclamando: «En Calatañazor perdió Almanzor el tambor», lo que viene a significar que Almanzor perdió su alegría porque había sido derrotado por primera vez.
La figura aparecía y desaparecía y cuentan que seguramente se trataba del diablo que lloraba el desastre de los musulmanes. Desde ese día, Almanzor no quiso ni comer ni beber y murió en la ciudad de Medinaceli.
Bonita leyenda… ¿Verdad?
3. Iglesia de Santa María del Castillo:
Está en la Calle Real, como a media calle, en una especie de plazoleta. No tiene pérdida.
Es románica, del siglo XII, aunque tiene algunos añadidos de épocas posteriores.
Lo que más destaca es su fachada principal donde podrás ver un arco de medio punto y 3 arcos ciegos que están encima. Los capiteles a ambos lados de la puerta corresponden a Sansón con el león y a lo que puede ser una arpía.
4. Plaza Mayor:
No te vayas a esperar una plaza mayor cuadrada, no, no. Esta es triangular.
En el centro, tiene una picota del siglo XV, lo que quiere decir, que en esta villa estaban autorizados a impartir justicia a los reos.
Al lado está la Piedra del Abanico en la que puedes ver el fósil del tronco y las hojas de una palmera.
5. Castillo:
Justo al final del pueblo están las ruinas del castillo. Hay pocas escaleras y la verdad es que merece mucho la pena entrar porque, lo que sí que hay, son unas vistas espectaculares de toda la zona.
Si quieres, sube a la Torre del Homenaje, hay unas escaleras habilitadas por las que resulta fácil llegar hasta arriba. Una vez en lo alto tómate tu tiempo contemplando volar muy cerca de ti a los buitres y escuchando el silencio. ¡¡Una pasada!!
Si se te hace de noche, estás de suerte porque empieza la magia. El castillo se ilumina, las estrellas inundan el cielo… y es que, estos cielos son Starlight, lo que quiere decir que son de los más limpios del mundo.
Fijo que después de darte la vuelta por el pueblo te ha entrado hambre o, por lo menos te ha entrado el gusanillo de probar los típicos torreznos de Soria. ¿A qué sí? ¡¡Cómo nos conocemos!!
Las 2 veces que hemos ido, hemos parado en el Restaurante Calatañazor que está en la Calle Real, 10.
Tienen un salón en el que puedes comer a la carta, pero, si buscas algo menos «formal» en el bar ponen unas raciones de escándalo. Te recomendamos el chorizo, el queso de oveja y los patés de diferentes setas de la zona. No tenemos palabras para describirlo.
Si tú también quieres disfrutar de esta experiencia gastronómica, más abajo, en Datos Básicos te dejamos web, teléfono y demás información sobre el restaurante.
Espera, espera… que la visita de hoy no acaba aquí. Todavía te queda visitar el sabinar. Así que venga… ¡¡A bajar esos torreznos!!
A sólo 3km de Calatañazor está la Reserva Natural del Sabinar de Calatañazor, uno de los bosques de sabinas mejor conservados del planeta.
Algunos ejemplares alcanzan los 14 metros de altura y los 5 metros de perímetro. Pero… ¿Qué es lo que hace a este bosque tan especial?
Resulta que estos árboles son unos verdaderos fósiles vivientes, una especie que ha llegado hasta nuestros días desde la Era Terciaria, casi «ná».
Las sabinas aprendieron a colonizar los territorios calizos, secos y desnudos que emergieron de los fondos marinos para convertirse en páramos pedregosos y sierras desnudas. Toda una proeza que se convierte en algo aún más grande en el Sabinar de Calatañazor.
Además de contar con árboles de entre 200 y 400 años de edad, supera con creces la densidad normal que suele ser de entre 15 y 30 sabinas por hectárea pero que en el Sabinar de Calatañazor oscila entre 150 y 210 árboles por hectárea. ¡¡Alucinante!!
No tengas prisa en recorrer el bosque. Entretente entre los árboles admirando sus retorcidos troncos y sus raras formas y disfruta del paseo.
Y… ¿Qué te parece si te decimos que puedes ver el sabinar desde el aire? Pues… puedes, con este paseo en globo.
Si quieres alargar tu escapada, te proponemos que te acerques a La Fuentona de Muriel que está a 6 minutos en coche. ¡¡Te sorprenderá!!
A continuación te dejamos toda la información que consideramos de utilidad para hacer tu visita más fácil
Datos Básicos:
- Mapa de los 5 lugares que no te puedes perder en Calatañazor.
- Restaurante Calatañazor
- Dirección: Calle Real, 10
- Teléfono: 666 193 222
- Email: reservas@calatanazor.com
- Carta: Consúltala aquí
- Puedes hacer tu reserva online
- Cómo llegar desde Calatañazor al Sabinar
- Cómo llegar desde el Sabinar de Calatañazor a la Fuentona de Muriel
- Hotel: Siempre que vamos a Soria nos quedamos en el Hotel El Cielo de Muriel.
Si todavía te sobra tiempo, te recomendamos las siguientes actividades:
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