¿Sabías que en Salamanca hay un lugar donde las calles cuentan historias y los pueblos parecen detenidos en el tiempo?
Bienvenido a la Sierra de Francia, ese rincón al sur de Castilla y León que muchos aún no tienen en el radar… y mejor para nosotras, que nos gusta llegar antes de que se llene de postureo.
Aquí no encontrarás resorts ni cócteles con sombrillita, pero sí tradición, naturaleza a raudales y pueblos que huelen a chimenea y saben a receta de la abuela.
Desde la famosa La Alberca hasta joyas menos conocidas como Mogarraz, Miranda del Castañar o San Martín del Castañar, esta zona es un caramelito para quienes buscan escapadas con alma (y sin colas para hacerse selfies).
¿Te vienes? Que hay más que ver en la Sierra de Francia que en muchos países enteros.
Palabrita.

1. La Alberca: El alma de la Sierra de Francia.
La Alberca no es solo un pueblo bonito, es un viaje en el tiempo.
Declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1940, sus calles empedradas y las casas de madera te transportan a otro siglo. Y no es casualidad que esté en la lista de los Pueblos Más Bonitos de España. Aquí, cada rincón tiene una historia que contar.
Qué ver y hacer en La Alberca:
- La Plaza Mayor: El corazón palpitante del pueblo. Balcones repletos de flores, terrazas donde disfrutar de un buen vino y, por supuesto, una gastronomía serrana que te hará querer quedarte más tiempo del planeado.
- El Marrano de San Antón: Una tradición que no te puedes perder. Sueltan un cerdo por las calles, lo alimentan los vecinos y después lo subastan para obras benéficas. Tradición y generosidad, todo en uno.
- Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción: Aquí podrás admirar un retablo barroco y unos frescos que te dejarán sin aliento.




2. Mogarraz: El arte en cada rincón.
A solo 10 minutos de La Alberca, Mogarraz es un lugar donde la tradición y el arte se abrazan. Conjunto Histórico-Artístico desde 1998, su mayor atractivo son las pinturas que adornan las fachadas. ¡Cada casa es una obra maestra!
Los retratos de Florencio Maíllo:
En los años 60, un vecino de Mogarraz se encargó de fotografiar a los habitantes del pueblo para que pudieran obtener su DNI. Lo curioso es que esas imágenes, que en principio eran solo un trámite administrativo, acabaron siendo el alma de la tradición del pueblo. Décadas más tarde, el artista Florencio Maíllo decidió transformar esas fotos en una exposición permanente, creando un homenaje visual a la gente de Mogarraz. Pasear por el pueblo es como caminar por una galería de arte al aire libre, con cada casa mostrando el rostro de aquellos que le dan vida a este encantador lugar.
Otros imprescindibles:
- La Plaza Mayor: Punto de encuentro, siempre animado.
- Ermita de San Blas: Pequeña, pero llena de encanto.
- Artesanía local: Aprovecha para llevarte algún souvenir único, hecho a mano con todo el amor de la zona.




3. Miranda del Castañar: El pueblo amurallado.
Miranda del Castañar es el ejemplo perfecto de cómo un casco histórico amurallado puede transportarte siglos atrás. Su castillo, que parece sacado de un cuento, es solo el principio de lo que descubrirás.
- La Plaza de Toros: Una de las más antiguas de España. Una joya que pocos conocen.
- El Castillo: Aunque no se puede visitar por dentro, su silueta domina el paisaje y te invita a imaginar historias de caballeros y reinas.
- Las Puertas de la Muralla: La Puerta de San Ginés es uno de los accesos más emblemáticos, perfecta para empezar tu recorrido.




4. San Martín del Castañar: Tradición que huele a flores.
San Martín del Castañar es uno de esos pueblos que, al pasear, te dan la sensación de que el tiempo va a otro ritmo. Lo que más llama la atención son los maceteros decorados que decoran sus calles, con frases y dibujos que le dan un toque único.
Qué ver en San Martín del Castañar:
- Iglesia de San Martín de Tours: Con su estela romana en el atrio, es una parada obligada para los amantes de la historia.
- El Castillo y la Plaza de Toros: Restaurado, es ahora un Centro de Interpretación de la Reserva de la Biosfera.




5. La Peña de Francia: El techo de la sierra.
La Peña de Francia es el mirador de la comarca, con sus 1.727 metros de altura, y unas vistas que quitan el aliento. Aunque puedes llegar en coche, si te atreves a caminar, las rutas son impresionantes y te regalarán panorámicas espectaculares.
En la cima:
- El Santuario de la Virgen de la Peña de Francia: Un lugar de peregrinación que data del siglo XV, con un aura especial.
- La Capilla de la Virgen Negra: Según la leyenda, aquí fue donde Simón Vela encontró la imagen de la Virgen.
- Vistas panorámicas: Si el día es claro, puedes ver hasta la Sierra de Gredos.




6. Naturaleza a lo grande: La Batuecas y la Sierra de Francia.
El entorno natural de la Sierra de Francia es de otro mundo. Desde la Laguna de San Marcos hasta la Ermita de Majadas Viejas, este es un lugar para desconectar de todo.
Qué hacer en las Batuecas:
- Parque Natural de Las Batuecas: Un auténtico paraíso para los amantes del senderismo y la fotografía. Cada rincón parece salido de un cuento.
- Rutas señalizadas: En la oficina de turismo encontrarás videoguías y mapas para no perderte ni un rincón de esta joya natural.


La Sierra de Francia, un destino por descubrir:
La Sierra de Francia es un lugar que combina a la perfección historia, arquitectura, tradición y naturaleza. Los pueblos como La Alberca, Mogarraz, Miranda del Castañar y San Martín del Castañar te invitan a vivir un viaje lleno de sorpresas. Además, su paisaje natural te ofrece el escenario perfecto para desconectar.
¿A qué esperas para descubrir este rincón único de Salamanca? La Sierra de Francia te está esperando, ¡Y te aseguramos que siempre hay algo nuevo por descubrir!
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Datos Básicos:
- Mapa interactivo: Aquí podrás encontrar las mejores opciones de alojamiento en la zona. ¡No hay excusa para no planear tu próxima aventura!